El Enfoque de Sistema Seguro es un enfoque para el diseño vial que enfatiza en minimizar los riesgos de lesiones o fatalidades para usuarios de las vías. Este enfoque considera:
Las posibilidades de error humano.
La tolerancia a lesiones dependiendo de los tipos de choques.
Las fuerzas de impacto resultantes.
La habilidad del cuerpo humano para sostener las fuerzas del impacto.
Usuarios vulnerables de la carretera.
Crear un sistema con redundancia a través de capas de protección a distintos niveles.
Principios
Muertes/lesiones graves son inaceptables
Este enfoque enfatiza en que nadie debe sufrir de lesiones graves o la muerte a causa de utilizar el sistema de transporte.
Los humanos cometen errores
Este enfoque considera que es inevitable que los usuarios de las vías cometan errores. Por tal razón, el sistema vial debe ser planificado, diseñado y operado para poder tolerarlos sin tener lesiones graves como consecuencia.
Los humanos son vulnerables
La tolerancia del cuerpo humano a los impactos de los choques es limitada. Este enfoque trabaja con manejar los intercambios de energía cinética causados por choques entre vehículos, objetos y usuarios de las vías para evitar lesiones graves.
La responsabilidad es compartida
Todas las personas deben trabajar en conjunto para asegurar que no haya muertes/lesiones graves a raíz de incidentes de transportación.
La seguridad es proactiva
Las agencias de transportación deben usar herramientas proactivas y basadas en datos para identificar y mitigar los riesgos latentes en el sistema, en vez de esperar a que ocurran los incidentes y reaccionar a ellos.
La redundancia es crucial
Todos los elementos del sistema deben ser fortalecidos de modo que si uno falla, los demás pueden proteger a las personas.
Elementos
Usuarios seguros
El enfoque de sistema seguro atiende la seguridad de todos los usuarios, incluyendo los que caminan, corren bicicletas, usan transporte colectivo, y que viajan usando otros modos.
Vehículos seguros
Los vehículos son diseñados y regulados para minimizar las ocurrencias y la severidad de colisiones usando medidas de seguridad que incorporen lo último en tecnología.
Velocidades seguras
Los humanos tienen pocas probabilidades de sobrevivir choques de alta velocidad. La reducción de velocidades puede ayudar a mejorar la tolerancia humana a lesiones en tres maneras: reduciendo las fuerzas de impacto, proveyendo tiempo adicional para que los conductores se detengan, y mejorando la visibilidad.
Carreteras seguras
Diseñar las carreteras para ajustarse a los errores humanos y las tolerancias a lesiones puede ayudar grandemente a reducir la severidad de los choques que sí ocurran. Algunos ejemplos incluyen la separación física de las personas viajando a distintas velocidades, proveyendo tiempos dedicados para los diferentes usuarios para desplazarse a través de un espacio, y alertando a usuarios sobre peligros y otros usuarios de la vía.
Cuidado post-incidente
Cuando una persona se lesiona en un incidente, ella depende de que los primeros respondedores la puedan localizar, estabilizar su herida y transportarla hacia las facilidades médicas. El cuidado post-incidente también incluye análisis forense en el lugar del choque, manejo de incidentes de tráfico y otras actividades.